martes, 4 de agosto de 2009

Y ella insiste...

se apura, se envenena. Quiere que eso que desea se produzca "ya", como el descenso de peso que promete la faja de Sprayette, como la còmoda borrachera del Ron cubano.

Pero resulta que no... el tiempo tiene sus tiempos. Y si querès, si te gusta pensar que tenès hilos y hay un titiritero que los mueve, en todo caso estaràs respondiendo al tiempo de "sus" deseos.

Un Dios bien humano, bah.

Como èse que tiene flotadores y TAMBIEN necesitarìa una faja de Sprayette.

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