viernes, 26 de febrero de 2010

Mirà, Mario...

yo te creo ese personaje de chico (cuarentòn, bah) rebelde y filoso. Te puedo aceptar tus desprolijidades sobre "malformaciones varias" o "condiciones psìquicas" de mostros de nuestra faràndula. Pero no me pidas que acepte alegremente que le hayas hablado a Tognetti de "la papa", de remedios oncològicos, porque te ganò (y ni siquiera fue a vos Mario Pergolini, sino a Eyeworks, el nuevo dueño de Cuatro Cabezas) un juicio laboral.

Yo te escuchè decir màs de una vez que Tognetti era un mal tipo. Pero ni siquiera a los malos tipos se les desea una enfermedad. Aunque màs no sea, para que no te vuelva, viste, esa onda de energìa que emitimos cuando hacemos un (algùn) comentario.

Y ya sè que te voy a ver con Majul o con Rial, dando tus explicaciones del por què la menciòn a los medicamentos oncològicos. Y rièndote, y diciendo que "bueno, despues de todo es lo que pienso yo y nadie màs se tiene que hacer cargo". Pero sabès què pasa? Es como el tema de los desaparecidos. Cuando por medio hay sufrimiento, alguien que perdiò un hijo como alguien que perdiò la salud, el pie de plamo se hace indispensable.

Aunque te envuelva tu peluca de inimputabilidad, Mario Pergolini.

2 comentarios:

laspalmerassalvajes dijo...

No sé, hay algo que siempre olió a podrido en Pergonilandia. No puedo negar que me han gustado algunos de sus productos pero ese pretendido aire de superadito me causa hastío. Esa absoluta confianza en sus propias opiniones -muchas veces pedorrísimas- y ese desdén inexorable por las opiniones ajenas siempre me supo a falta de respeto. Claro, esta vez se le fue la mano, ¿no? Se cansó de los eufemismos berretas y afloró el resentidito sin vuelo que siempre quiso ocultar.


Y como el Maná, le están lloviendo juicios tupidito tupidito tupidito. ¿Será que hizo algún mérito?


(¿Se notó mucho que el tipo ya me los tiene al plato?)

IRINAMORA dijo...

Ninguna barrasada me sorprende en boca de ese mercader. Tuvo suerte el mono relojero.